La noche del 11 de noviembre de 2011, Jaleayah Davis quedó en salir con su amiga Kristin Bechtold.
Se suponía que las dos jóvenes iban a salir y divertirse un rato y luego pasarían la noche en casa de Kristin. Las dos mujeres se encontraron con Jordan Campbell, Freddie Scott y Katy Nelson. Los tres eran amigos de Kristin.
Pero algo salió muy mal para Jaleayah esa noche.
Pocas horas después, Jaleayah estaba muerta y su cuerpo horriblemente mutilado.
Kim Davis, la madre de Jaleayah, ha declarado que al principio nada le parecía extraño. Kim también dijo que estuvo en contacto con Jaleayah durante toda la noche, al igual que Taubi Davis, su otra hija y hermana de Jaleayah.
Según Kim, Jaleayah llamó a Taubi aproximadamente a las 3:23 de la madrugada, pidiéndole a su hermana que fuera a recogerla en una gasolinera. Taubi ha alegado que, durante esta conversación, escuchó a Jaleayah decirle a Kristin: «¡Dame mis llaves!».
Cinco minutos más tarde, según Taubi, Jaleayah volvió a llamar y le pidió que la recogiera en un área de descanso de la autopista interestatal 77, justo al otro lado de la frontera de Virginia Occidental.
Taubi alega además que, durante esta llamada, Jaleayah sonaba «histérica», llorando, maldiciendo e insultando a Kristin. Cuando Taubi preguntó qué pasaba, dijo que Jaleayah respondió: «Te lo diré cuando llegues».
A las 3:48 de la madrugada, la policía dice que un camionero llamó al 911 para informar que había visto lo que parecía ser un cadáver en el carril de paso de la interestatal.
Era Jaleayah, y los detalles de su estado eran espantosos.
Kim dijo que Jaleayah fue descubierta desnuda de cintura para arriba. Al parecer, había sido decapitada, le faltaba el pecho derecho y tenía una pierna rota por la mitad.
Los socorristas dijeron que encontraron el coche de Jaleayah a uno 400 metros de la carretera, todavía en marcha, con las puertas cerradas y los faros encendidos.
Según Kim, la ropa de Jaleayah había sido colocada, pulcramente doblada, en la barandilla junto a sus restos, con el sujetador colocado sobre la camisa y la camisa sobre el abrigo.
Más tarde, ese mismo día, Kristin Bechtold habría contratado un abogado, quien habría devuelto a la policía el llavero de Jaleayah.
Tras una investigación de 16 meses, la policía llegó a la conclusión de que Jaleayah conducía y salió despedida por la ventanilla del lado del conductor tras chocar contra una barrera de seguridad y que, a continuación, fue atropellada por un tractor remolque que circulaba por el carril de circulación.
La Oficina del Médico Forense de Ohio dictaminó posteriormente que la muerte de Jaleayah fue un accidente, siendo el alcohol un factor contribuyente. La Oficina del Sheriff del Condado de Wood considera el caso cerrado.
Kim Davis y otros investigadores independientes sostienen, sin embargo, que las pruebas indican que Jaleayah fue atropellada por su propio vehículo y que se golpeó fatalmente la cabeza contra un poste de la barandilla.
A partir de ahí, según la teoría discrepante, el conductor siguió avanzando a gran velocidad, aplastando la cabeza de Jaleayah contra otros postes mientras el coche arrastraba su cuerpo 25 metros hasta el carril de paso, donde se encontró su cuerpo.
Además, Kim ha señalado que tres de las personas que habían estado con Jaleayah -Kristin Bechtold, Katy Nelson y Freddie Scott- eran hijos de actuales o antiguos policías de Parkersburg.
El caso dio un giro extraño en 2013, cuando Ember Stafford, una residente de Marietta que afirmó ser testigo del accidente, fue condenada a seis meses de cárcel por hacer una denuncia falsa.
Ember supuestamente dijo que vio a otro coche forzar la salida del vehículo de Jaleayah de la carretera, provocando el accidente. Después de que la policía investigara sus afirmaciones durante 30 horas, Ember Stafford habría admitido que mentía.
Kim y Taubi Davis han mantenido el caso activamente discutido en línea a través de la página de Facebook, Justicia para Jaleayah. Además, Kim sigue compartiendo los archivos que ha obtenido a través de la Ley de Libertad de Información y planteando las preguntas que estos plantean.
En abril de 2013, el grupo activista de Internet Anonymous afirmó que sus miembros tomarían medidas para sacar a la luz un supuesto encubrimiento policial en el caso Jaleayah Davis. Hasta la fecha, no se ha producido ninguna acción de este tipo.
En 2018, Emily Nestor, que creció en la zona pero nunca conoció a Jaleayah, lanzó el podcast Mile Marker 181 para indagar más en lo sucedido. Desde entonces, se ha convertido en una escucha popular en la comunidad del crimen verdadero.
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